Le tengo miedo a la balanza. Mañana me peso, y no quiero, no quiero saber como estoy, porque sé que estoy por arriba de 48. Lo sé, y me da vergüenza, porque odio ese número, yo quiero 43. 5 kilos menos, y soy FELIZ, lo juro. Además hoy me comí la vida, todo lo que no comí en dos meses, HOY lo comí. Mañana NADA, n a d a. Más que agua, nada.

No sé en que me metí. Hace más de un año que estoy en esto, “enferma”, o como quieran llamarlo. Hace más de un año que no puedo no contar las calorías que consumo, es como que tengo una lista en mi cabeza con todas, y las voy sumando automáticamente. Ya hay cosas que no controlo de mi misma. Y me molesta, porque yo quiero hacer lo que YO quiero, y no lo que mi cuerpo quiera.

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1 Response to " "

  1. Ana says:

    si me diera cuenta de que estaba enferma después de un año todo habría sido más fácil. pero hasta que pasaron siete no fui realmente consciente de que tenía un problema serio. no dejes que las cosas empeoren y dedícate a lo que de verdad importa. no vas a ser feliz ni cuando peses 30 kilos. vas a ser feliz cuando te aceptes, cuando te quieras, y cuando aceptes que los demás te quieren y querrán tal y como eres. no te revistas de fachadas para el exterior.
    de todas formas, y lo tengo comprobado, se puede estar delgada (incluso más de lo normal) y sana.
    cúidate.
    saludos

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Una nena que se cree mujer; una chica que piensa que siendo flaca, va a lograr volar.